Sentir sueño luego del almuerzo es algo muy común y que les pasa a muchas personas.
El problema es que, a veces, las personas tienen que seguir trabajando luego de la hora del almuerzo o tienen otras cosas que hacer.
Si se tiene que continuar con alguna actividad, el sueño luego del almuerzo puede acabar siendo un gran problema.
A muchas personas les sucede esto casi diariamente, pero pocas saben a qué se debe.
La explicación clásica indica que para completar el proceso de digestión se necesita que la sangre se dirija hacia el aparato digestivo, dejando al resto del organismo con una cantidad menor de sangre.
Esto reduce la concentración en el cerebro, produciendo una sensación de sueño o cansancio.
No obstante, a lo largo de los últimos años, estudios han explicado que la relación entre el almuerzo y el sueño en realidad tiene que ver con los niveles de glucosa en la sangre.
La glucosa hace descender en el cerebro los niveles de orexina, una proteína que tiene la función de mantenernos alerta.
¿Es posible evitar el sueño luego de la comida?
La sensación de sueño y fatiga luego de la comida, es algo que puede evitarse.
A continuación, veremos algunos consejos para que puedas lograrlo y mantenerte alerta en los momentos en que más lo necesitas:
Proteínas
Para mantener el cuerpo activo, las proteínas son fundamentales. Las proteínas nos ayudan a mantenernos activos, por lo que es recomendable incorporarlas en los alimentos que se ingieran en el almuerzo.
Café
Muchas veces, lo que se hace cuando se empieza a sentir la fatiga, es beber café. Antes de hacer esto, recomendamos beber agua. Muchas veces, la deshidratación puede causar sensación de fatiga.
Desayuno
Si bien estamos hablando del almuerzo, el desayuno determinará gran parte del día en general.
Mientras mejor sea la calidad del desayuno, mejor será el desempeño a lo largo del día. Un desayuno saludable debe contener alimentos como cereales, yogurt, pan y frutos secos.
Grasas
Es importante evitar la ingesta de grandes cantidades de grasas a lo largo del almuerzo, cuando se necesita mantenerse despierto a lo largo del día.
Debemos tener en cuenta que las grasas tardan más tiempo en digerirse, provocando entonces una sensación de pesadez.
También se deben evitar los chocolates, las gaseosas y las golosinas, puesto que, si bien es cierto que se aporta energía, esta no se mantiene durante mucho tiempo.
Ejercicio
Ciertamente, si estás en el trabajo, quizás no puedas hacer mucho ejercicio. Pero sí se puede hacer una pequeña caminata o subir unas escaleras durante algunos minutos. Esto ayuda a recuperar la energía rápidamente.
Comer en intervalos
Cuando se deja pasar mucho tiempo entre comidas, se llega a cada una de ellas con más hambre de la ideal.
Si se consumen pequeñas cantidades de alimentos saludables con un menor plazo de tiempo entre cada ingesta, se puede mantener una buena actividad.
Además, ayuda a llegar con menos hambre a las comidas centrales del día, evitando, de esa manera, que se trate de comidas abultadas o con alto contenido graso.